lunes, 27 de junio de 2016

EL BOSQUE DE LOS SORTILEGIOS (EPISODIO #194)


Recorrer el camino del indio era un riesgo, era por eso que a unos cien metros del punto de partida detenía mis piernas, forzando la quietud de mis compañeros, que metros atrás me seguían, en una hermandad nunca vista. El inesperado camino del corredor indígena me cautivaba hasta las tripas, pero tenía nervios. ¿Y si ese indio era malo? Podíamos morir descuartizados. Con mucha suerte Sofía hallaría nuestros restos para llorar hasta el final de sus días. Una horrorosa sensación de desamparo me afligía con vehemencia. Encima la mirada lánguida del gato me daba pena. Girando, retrocedía. Conmigo arrastraba a mis hermanos, que por cierto ya llevaba en las venas. Exploraríamos el bosque de los sortilegios entre troncos y malezas, pero jamás por el camino del Inca.